Mejor amigo II

Eres uno de los poco que me conoce tal y como soy, de esos que creo que podría recordarme quién soy cuando estoy fuera de mí. Eres uno de esos con el cual puedo ser totalmente yo misma sin importar nada y es que, contigo he llegado a un nivel de confianza que nadie nunca había logrado antes.
Hace tiempo que no escribía pero creo que este día fue un detotante para mis emociones y para extrañarte más que nunca, pues sabes muy bien que eres super importante y especial para mí...
Que entre la multitud te elijo a ti porque me has sido leal, siempre has estado ahí para mi cuando lo necesito a pesar de ser una persona complicada (lo admito)
Pero tú, tú jamás me has hecho sentir como tal, solo te sientas a escuchar todo lo que tengo guardado en mi mente
a escuchar todo lo que mi corazón aguanta y que suelta cuando ya no puede más y eso, eso vale oro para mí.
Tu siempre me haces reír y a pesar de no ser el mejor consejero del mundo, logras hacerme sentir cerca de ti a pesar de estar a kilómetros de distancia.
Gracias, por ser tú, por amarme tanto, por aceptarme tal y como soy, por escucharme siempre, por consolarme cuando siento que el mundo se me viene abajo, por cuidarme cuando sabes que me estoy yendo demasiado alto.
Sinceramente no me alcanzan las palabras para explicarte todo lo que siento... Ojalá pudiera resumirlo en un abrazo, pero no estoy ahí y ¡maldición! (Perdón por maldecir) cómo te extraño...
Y no es un secreto, porque siempre te lo digo, que tú eres el mejor amigo que la vida me ha podido dar y que es por eso que te amo demasiado y que espero que algún día, sin importar que tan lejos u  ocupados estemos podemas volver a vernos y seguir haciendo maravillosas memorias.