Caminar.

 Agosto, hace tiempo no escribía... bueno, he durado más tiempo sin estar por aquí pero hoy se siente diferente porque me he movido a otros lugares, he estado explorando partes de mi corazón que desconocía y que ahora me detengo a verlas con cierta admiración. No podría decir que soy una persona nueva, me encuentro haciendo esto como un viejo hábito, ni siquiera desahogando como solía hacerlo si no, de una manera en la cual estoy sacando todo eso que se encontraba en mi cabeza y no lograba encontrar la manera de ordenarlo; darle algún tipo de forma que me hiciera comprenderle para así comprenderme a mí. 

Soy una mujer, como las estaciones, tan ciclíca que no sabría bien el como explicarles cuando es otoño, invierno o sequía para mí.

He desatado tantos nudos, he cruzado valles de la oscuridad, he dejado que mi piel se entumezca por el frío de la cascada para después disfrutar y me he encontrado con ciertos ojos gatunos que me hacen pensar que me conocen desde antes, desde hace mucho tiempo atrás. 

He soñado tantas cosas, a veces desearía recordarlas todas pero sé que si lo hago no pararía de llorar. Me han mostrado una pérdida y ella es ese corazón que llena ese pequeño vacío que no comprendía en mí.

Veo las cosas de una manera tan... que no sé cómo llamar y ahora que he abierto ciertas puertas ya no puedo parar.  Las plantas crecen y crecen, los animales sienten, el mundo respira alrededor de mí, mientras trato de cuidar a esa niña que alguna vez quise dejar atrás. 

Quién sabe cuantas cosas puedan pasar, mi alma se siente más ligera y el enojo es menos duradero, convivo con mis defectos y trato de saber cada vez más, quién soy en realidad pero ¿A caso eso debería de importar? el mundo dice tantas cosas, que simplemente nos olvidamos de ser. 

Me duele mucho la cabeza y todos hablan de espiritualidad, inteligencia emocional, cosas materiales, pero a mí, ahora mismo en este instante no me interesa nada de eso y por más hippie que suene, por más... no sé, cualquier otro adjetivo que quieran ponerle, yo sólo quiero existir ahora y sentir cada una de mis células, cada una de mis partículas, cada una de  mis emociones y sentimientos. porque mi cuerpo está cansado, porque mi cuerpo ya no aguanta más, porque mi mente no para y lucho contra eso que se llama ansiedad, porque me ha dolido el alma durante tantos años que simplemente quiero dejarme caer y porque cada día estoy tratando de ser congruente y de enlazarme con un mundo diferente al mío pero ¿Saben qué? todos tienen barreras y a veces uno se cansa de querer pertenecer, de querer llegar  un acuerdo, de simplemente ser.

Construir, todos siempre hablan de construir pero el día de hoy sólo quiero tirarme en el suelo, entregar mi cuerpo a todo lo bello y dejar que me absorba tanto la oscuridad como la luz. 

Dejar ir, dejar ir, dejar ir, entrego todo lo que me pesa, lo que no sirve, lo que ya no debería de estar ahí, entrego mis lágrimas, entrego mi sonrisa, entrego mi dolor, entrego la ira, entrego el corazón, entrego el odio, entrego el amor, entrego cada parte de mi ser que juntas son un engranaje y que simplemente haga que todo sea una catastrofe armoniosa que tiene sentido.

Ya ni siquiera me interesa ser feliz, sólo quiero esa armonía que provoca paz.

A veces solo quiero caminar y caminar, sin que nada más tenga sentido.


Caminar y caminar.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Espacio entre lo que fuimos, lo que somos y lo que fue.

no title