Y creo que caímos desde la primera vez
 que nuestros labios se rozaron
porque desde ese entonces
 no hemos podido detenernos
me brindas cierta calma, yo te brindo cierto frenesí
no quiero dejar de sentir tus besos,
ni tu mirada sobre mi
no quiero dejar de escucharte decir te quiero
ni dejar de escucharte reír
no quiero soltarte, pero tengo que.
Dios mío...
Aunque intenté muy fuertemente no estar triste
me dueles, me dueles porque me importas
porque te quiero más de lo que pensé
Aún sigo aquí,  pero ya te extraño
ya extraño cada pequeña parte de ti
y no quiero llorar frente a ti
porque no quiero que estés triste,
no quiero que veas mi dolor
no quiero que estés triste porque yo lo estoy.

Te quiero, besa mis labios una vez más
mírame así, de esa manera tan encantadora
que siempre haces, que jamás olvidaré
déjame tomar tu mano
no sé porqué me encanta tanto sostenerla
me hace sentir bien
un poco más cerca, pero no demasiado cerca de ti.

Todo es tan perfecto, perfectamente imperfecto
todo es como debería de ser
no cambiaría nada en absoluto
no me arrepentiría jamás
es demasiado hermoso
a veces siento que estoy soñando
pero sé muy bien que es real
sin embargo siento miedo, de perder el control
de que se me vaya de las manos
como casi siempre, cuando siento demasiado.






Comentarios

Entradas más populares de este blog

Espacio entre lo que fuimos, lo que somos y lo que fue.

no title