Una vez más.

Diseñé una vida para mí, hay tantas cosas que quiero hacer... 

Y ahora mismo tengo tantos sentimientos encontrados que no sé por donde empezar.

Al final del día todos estamos solos, y sí, puede que al principio sea una medicina amarga de tragar pero es la verdad.

Tengo muchas cosas maravillosas, la vida me ha entregado varias cosas hermosas sin yo siquiera haberlas pedido y por ello estoy sumamente agradecida. Pero a veces, a veces simplemente quiero más y no porque sea ambiciosa, si no porque esas mismas cosas de siempre ya no parecen encajar en mi vida cuando yo estoy tratando de avanzar.  No está mal aspirar a mejores cosas.

Me he encontrado atrapada últimamente en este sentimiento de que mis amigos tal vez no son del todo mis amigos y pues, no es la primera vez. No es que no sean buenos amigos, porque en ciertos aspectos lo son... pero al final del día ellos terminarán no encajando en mi vida porque no tendrán lo suficiente, no podrán seguirme el ritmo y la mera verdad es que, jamás han tenido esa capacidad... más bien yo tuve que bajarme a su nivel para no tener que seguir haciéndome daño exigiéndole cosas que no debería exigir, que ellos simplemente deberían de hacer porque les nace del corazón.

Yo jamás he encontrado a una persona que sea capaz de estar a mi altura y digo esto sin aires de arrogancia, a lo que realmente me refiero es que yo no he sido capaz de encontrar a esa clase de amigo que yo sé que valdrá totalmente la pena, esa clase de amigo que sé que yo soy y que sería si las demás personas me lo permitieran ser, esa clase de amigo que de verdad merece ser nombrado "amigo".

Una vez más me encuentro atrapada en el sentimiento de que no encajo del todo aquí, de que jamás he pertenecido aquí porque mi vista y mi mente siempre han estado en otra parte. Hubo un tiempo en el que odiaba todo esto, este lugar, las personas, la sociedad; Estaba tan enfadada con el mundo porque no podía creer lo realmente cruel y asqueroso que podía ser, estaba tan decepcionada y asqueada, sentía tanto desprecio que ahora mismo miro a ese instante y les juro que jamás quisiera sentirme de esa manera otra vez; Porque es enfermizo, deprimente, te destruye por dentro.

Yo jamás pido nada, jamás exijo amor, cariño, comprensión... simplemente acepto lo que la vida me da pero eso si, jamás seré conformista con pequeñas migajas.

Soy feliz pero a veces me encuentro atrapada en ese sentimiento de "Ojalá pudiera encontrarme algún día con alguien que sé que vale tanto como yo, con alguien que dé tanto como yo"

Había un tiempo en el que eso me decepcionaba, pero ahora no lo espero de la misma manera que antes, ahora solo es un anhelo fantasma escondido en mi interior porque aprendí a vivir con las pequeñas cosas que al final del día son un poco más hermosas  y que me conmueven en lo más profundo del corazón.