Tus palabras aún martillean en mi cabeza de vez en cuando.
tu voz es como un taladro en mi cabeza, y me ha costado bastante ir ignorándolas, no tienes idea de como. Tantos años... ¡tantos años! poco a poco me he ido recuperando pero aún sigo siendo débil, aún me caigo y todo es por ti, que implantaste esto en mi desde el comienzo. Me rompiste, me aplastaste, trataste de matar el "verdadero yo" pero yo no lo permití, y ni siquiera sé si de verdad era tu intención. La verdad es que me harté, yo jamás he querido ser como tú.
Tu manera de acercarte a mí, tu manera de decirme las cosas, tu manera de pensar y criticarme, lo que hicieron fue romperme, hacerme caer al suelo...
para mí tu fuiste más un desaliento que una motivación, y así ha sido siempre.
Yo solo... sólo quería sentirme en armonía, ya ni siquiera me importaba no encajar porque eso ni siquiera ya se podía arreglar, yo solo quería poder convivir en paz.
Ellos jamás me comprenderán. y yo... yo siempre tengo que ser paciente, tengo que comprenderlos, tengo que ser una "buena chica".
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