Mi despedida.

Querido conocido, que solías ser mi mejor amigo:

No sé como demonios llegaste a ser alguien especial para mí
No sé como fue que tuve tanto cariño hacia ti
Porque sinceramente nunca congeniamos
Fue realmente estúpido haberme aferrado a ti
Porque cuando estabas ahí era como si no lo estuvieras
Y siempre esperabas a que enfureciera para reaccionar y hablar de las cosas que a mi realmente me importaban demasiado

Siempre fuiste demasiado inmaduro
Y en lugar de hablar las cosas
Sólo me atacabas y me hacías daño
yo solamente porque te quería
Las dejaba pasar porque eran cosas pequeñas
Pero llegó un día en que sobrepasaste la línea
Tú me hiciste daño, y te metiste con cosas que no debías
Sin embargo después de haberte casi mandado al caño
Te di la oportunidad de pensar y ver el daño que habías causado
Y pues lo hiciste bien, y yo te perdoné
Porque en ese momento yo te quería demasiado
Y no deseaba perderte
Pero unos momentos más tardes
Todo volvía a ser como antes
entonces volvías a hacerme enfurecer
Y reaccionabas y decías lo que sentías
Y no tienes idea de cuanto significaba para mi que me dieras algo como tus sentimientos
Jamás te fijaste en eso...
¿Por qué las cosas que construyes las arruinas?

Ya no te quiero
No te detesto
No me importas
No siento nada.

Esta muy claro que desde siempre, fui yo la que era tu amiga, pero tu nunca fuiste un amigo para mí.

Esta es mi despedida...
sólo te digo:

espero que sigas con tu vida y que seas feliz.

Sinceramente:

Oriana.